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Gabriel Jaraba. Comunicación y humanismo

Tenemos la mejor generación de jóvenes que nunca ha habido en España

Este blog se ha quedado turulato unos cuantos días a causa de los exámenes. De los míos y de los de mis alumnos, no os creáis. Hemos concluído la segunda experiencia del curso preparatorio para la ESCAC; antes de cursar el graduado superior de cine y audiovisuales, cuatro años y título propio de la Universidad de Barcelona. Los alumnos que optan por este curso --en el que propongo la asignatura de Introducción a la Comunicación, la Actualidad y las Humanidades-- pasan por un proceso de adaptación a una carrera con una fortísima exigencia profesional: no formamos especialistas en una u otra herramienta sino cineastas de una pieza, y sobre todo, personas. Por lo que a mí respecta, tatacháaan!: el curso que viene empiezo el doctorado en Ciencias de la Comunicación. O sea que espero ser doctor antes de cumplir los 60. Uf!

Si hay algo que un docente puede afirmar con rotundidad es lo siguiente: las actuales generaciones de estudiantes son los mejores jóvenes que ha habido nunca en España. Así de claro. Estoy hasta las narices de las murgas sobre que si estos no valen nada, que si están apalancaos, que no saben nada de nada... Rollos de puretas que añoran unos tiempos guapos pero terribles. Atención a la afirmación de Marin Amis: "la ideología es una droga sintética que alimenta el ego". Diana. Los jóvenes nos retan a estar abiertos y en contínuo cambio. El problema no es soyo, sino muy otro: uno, un sistema de enseñanza secundaria en el que todo el mundo ha vuelto loco a todo el mundo; segundo, que nadie les habla de lo que es esencial.

A mis alumnos les hablo de lo que es esencial. Les explico nuestra situacíón: somos náufragos en una playa desierta de una isla desconocida. Hemos de aprender a vivir, y para ello, hay que saber mirar y ver. La educación no es ni el aprendizaje de habilidades ni de la gestión del conocimiento, es suscitar una cierta manera de mirar, que atraviese el plomo de la estupidez y que no se debilite ante la kryptonita de la maldad (este es un homenaje a Bob Siegel, Superman y la redacción del Daily Planet).

Cuando les hablas de lo que es esencial, escuchan y despiertan. Claro que hay que conocer a cada uno por su nombre, hay que saber qué les mueve, no qué hacen sino quienes son. Tomarles en serio como uno quiere que le tomen y no tratarles como idiotas sino como hermanos. Es un privilegio estar con los jóvenes estudiantes de hoy, son los mejores jóvenes que nunca ha habido en España.

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